De verdad que he estado pensado que algo que hacer, algo que decir que no significara eso que yo me sé, pero no he podido.
Llevo todo el santo día emparanoiada con eso, pensando en que hacer, que decir, como actuar...
Y nada, no hay Dios que me ayude a dilucidar una reacción a su coletilla.
Es bastante deprimente saber que pase lo que pase, diga lo que diga, me va a contestar lo mismo.
Que sí, que muy bien, sé (espero) que lo dices (digas) de corazón, y que tarde o temprano te cansaras de repetirlo, te darás cuenta de que realmente tu no eres así, y pararas. O eso al menos espero.
De todos modos, aunque con mis más y con mis menos, el día no esta saliéndome del todo mal.
Sí, estoy griposa, no paro de estudiar y no tengo constancia de que mis seres más allegados, (o los que deberían serlo), me necesiten. Y que queréis que os diga, necesito sentirme necesitada para poder necesitar a los demás. Pero, aun con este sentimiento de soledad que me corroe por dentro, las heridas del corazón, que espero que se curen pronto, y sin descanso, hoy ha sido un buen día.
Dentro de las posiblidades que hay dentro de mi cabeza para considerar un día de mierda como un buen día, hoy, no se que ha pasado, puede que haya sido que por fin me he atrevido a hacer eso que llevo meses diciendo que haría, o que me he dado cuenta de que no me preocupa para nada el curso, porque se con certeza que lo tengo aprobado, aún sin haber hecho los exámenes, o quizás sea el hecho de que en el lugar donde no esperaba encontrar nada, he encontrado oro.
No sé, lo que si sé es que por fin, tras un fin de semana realmente malo, ha llegado la calma, y espero que dure, aunque solo sea unos días, que tampoco quiero relajarme...
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